5 a.m. Jueves.
No sé cómo expresar todo lo
que quiero/debo o estoy sintiendo.
Sé que las situaciones
comienzan a hartarme, pero los putos sentimientos no cambian.
Las segundas oportunidades
son segundos errores, los segundos dilemas causan terceros dilemas, y las dudas
solo acompasan más a un corazón desinerte. Pero me vence más la idea de pensar
en un futuro a los putos consejos que me hacéis tragar sobre todas vuestras
experiencias de fracaso con las segundas oportunidades.
Porque no quiero creer en
ellos… no…
No esta noche.
Tengo todo tan claro que me
asusto a mi misma.
Sé lo que quiero. Sí, joder,
claro que lo sé. El problema es no saber lo que quieren los demás, que te
frena. Te hace parar y pensar: … Joder, ¿y si estoy perdiendo mi puto tiempo?
Ahí es cuando decides salir a
la calle, y buscar la típica historia bonita entre desconocidos que comienzan a
entenderse… Pero la empiezas, y cuando llega ese primer beso dices… JODER, ESTO
NO ES LO QUE YO QUERÍA cuando tenías las cosas tan claras. Y vuelves atrás de
nuevo destruyendo todo PORQUE TU PUTA PROPIA MENTE NO SE ACOMPASA A LO QUE ESTÁ
VIVIENDO.
Descanso…
Esta noche necesito la
palabra puta para subsistir…Sí. Tantas putas en esta ciudad, al final necesitas
meterlas a todas en algún sitio. Aunque sea en el aura de tus propios
pensamientos.
PUTA.
Y no hay más, a parte que
prefiero quedarme con el “ahora”.
Y eso, QUE ESTOY HASTA LA POLLA DE QUE VENGA EL PUTO
PASADO A ABRIRME LAS PUTAS CICATRICES que deje marchar…
Aunque gusta, eh?
Me gustaría poder decirte que
voy a estar ahí hoy, y mañana, y dentro de varias semanas, y así cada día.
,,,No creo que vaya a decírtelo,
sé que no lo haré en realidad; pero sí voy a estarlo.
